sábado

Un jueves único


El jueves pasado ha sido uno de los pocos días en lo que he salido y por fin me lo he pasado genial, sin mirar quien me mira o quien está atenta a mí, simplemente porque la compañía era muy grata y necesitaba a esas personas cerca, algunas más y otras menos, había quedado con D.G. para ir a ver la película de New Moon, pero gracias a dios que no fui a verla, primero porque no es una peli que me motive pagar 7 euros por verla y segundo porque había quedado con un chico que conoció en internet y creo que la cosa no cuajo, como ya no tenía planes, en clase decidimos ir al Zombie, nuevo local de moda entre la gente más moderna de Madrid, frente al famoso Palestino, es barato y está muy bien decorado y te puedes encontrar de todo dentro, desde un chico con pinta de doctor Jekill a una chica con pinta de bailarina, mis profesores se pasan las clases insistiendo que vayamos a estos locales si queremos hacernos un hueco dentro del mundo del coolhunting, durante la clase también quede con A.F. a las 10:10 en la puerta de Ohm, A. es un niño encantador, canario, azafato y con buen humor, me lo paso muy bien con él siempre que decidimos vernos, D. me llamo y también quedé con él en la puerta de la disco a la misma hora para ir al Zombie con las niñas de mi clase, son muy simpáticas pero no puedo estrechar lazos con mi futura competencia, jajajjaja.


No tenía muchas ganas de salir solo de tomar algo e irme a casa, estaba muerta, pero me empecé a animar ya que estar con D. o te animas o terminas deprimiéndote, D. es un niño que estudió para ser actor, canario y muy majo pero muy especial, hay que saber tratarlo y a veces se vuelve insoportable pero ya estoy acostumbrada a estar con él y terminas cogiéndole cariño pero solo un poco, es broma, a las niñas de mi clase les pareció un chico encantador y decidimos irnos a una fiesta en Malasaña de un amigo de D., pero poco a poco la gente se echaba para atrás con lo que al final decidimos salir D., A., C. y yo. P. me dio un toque, pensaría que estaba en casa, se me olvido decirle que iba a salir a tomar algo, lo llame y el pobre no tuvo una buena tarde, termino hasta los co…… de un profesor que no hace más que ponerle regulares, no me lo explico puesto que creo que es uno de los poco amigos que tengo, por no decir el único, que son inteligentes, así que le obligué a salir pero no le apetecía porque decía que llevaría el mal allá donde fuera, pero luego se animo y vino, fue una sorpresa, me gustó y me anime a salir de marcha por él, porque lo necesitaba y porque lo paso muy bien con él estemos donde estemos, al final terminamos como los jueves de antaño, en el Nike, que es un bareto gay en chueca donde sirven minis más o menos baratos y te lo pasas muy bien observando a los insectos autóctonos de la zona, no debí beber pero lo necesitaba así que le robaba sorbitos a P. , D. para no variar y después de pasarse la semana diciéndome que ya no bebería más y que iba a cambiar se paso toda la noche de chico en chico, de flor en flor y de copa en copa, a veces odio decirle algunas cosas(solo algunas ya que es una persona a la que creo que no puedo decirle o contarle nada y lo comprobé esa noche con un comportamiento que tuvo) porque pensé en un momento de la noche que iba a decirlo, me podría haber hundido allí mismo pero gracias a dios le mire mal, fuimos al baño y le leí la cartilla, aparte de eso se comportó y se mantuvo en su línea y me reí mucho con y de él como siempre, después de Nike y de beber como dos copas sorbo a sorbo y sin manos, nos fuimos a Studio 54, para ser jueves estaba vacio pero claro llovía y hacía frio, pero mucho mejor así, allí con C. D. P. me bebí tres copas a medias, creo que me puse piripi, no me emborrache como antes pero si estaba muy feliz y cariñosa y lo necesitaba, a mitad de noche llego A. de la fiesta de Malasaña, A. es un encanto de niño extranjero, muy amigo de D. y conocido mío. En un abrazo de la noche con P. perdí un pendiente, encontré la parte de atrás pero no la de delante, pero entre la borracherita mía y la de él y por más que nos tiramos al suelo a buscarlo no lo encontramos, menos mal que P. tiene un piercing en la orejilla y me lo puso en la mía, al día siguiente tenía la oreja que parecía un bubango, claro mis manos sucias y las de él pues habrá hecho una reacción química o algo, que dolor pero ya la tengo mejor, creo que podía haber seguido bebiendo pues no me sentaba mal y cada vez estaba más alegre y feliz, pero creo que fue suficiente ya que este jueves pienso volver a salir y emborracharme otra vez con las niñas de mi clase.


A las 4 acompañe a P. a su casa dado su estado de embriaguez, me reí mucho por el camino pero me preocupo cada vez que lo veo así jajajajajaja.

Creo que ha sido el mejor jueves en mucho tiempo, por lo menos 4 meses, sé que si hubiese sido planificado con tiempo no lo hubiésemos pasado tan bien y sé que si el jueves que viene volvemos a salir será distinto, es de esas noches en las que uno sabe que son especiales y solo pasan cosas especiales.


Canción del momento (un momento único, sentada en el Mcdonald con unos chicos que se han sentado en la mesa de al lado y uno de ellos como no tenía silla me pregunto que si se podía sentar conmigo, que vergüenza ahora lo veo tan mono devorando la hamburguesa y las papas y me está dando un hambre tremendo, un hambre real y otro imaginario, solo he comido una ensaladita, jooooooo)

I gotta feeling – The black eyed peas.